Emiliano Alvarado
Fotos: Jacob V Zavaleta

Cuernavaca, Morelos. En el segundo día de actividades de los Juegos Nacionales Sobre Silla de Ruedas, la veterana de 59 años Rocío Serrano se colgó los primeros dos metales – ambos de bronce — para la causa auriazul en lanzamiento de bala y jabalina.

"Olvidaré lo que ocurrió ayer y solamente daré lo mejor de mí en esta prueba que es la más fuerte". Con esta premisa, la atleta felina entró al Estadio Centenario, de Cuernavaca, Morelos, para competir en la prueba de lanzamiento de bala y le dio resultado.

La ama de casa y trabajadora de tiempo completo fue la última en participar. La espera le sirvió para concentrarse y dejar una marca de 7.92 metros, misma que le dio el tercer lugar de la prueba por debajo de María de los Ángeles Ortiz, de Veracruz, con 10.16 metros, así como de Catalina Rosales, del DIF Nacional, con 8.84.

A pesar de que esta marca le dio a Rocío Serrano el primer lugar en la categoría S7, a la cual ella pertenece –con 13 nacionales a cuestas–, el comité organizador decidió juntar todas las categorías en esta prueba para la entrega de medallas.

Sin embargo, esto no menguó la felicidad de la lanzadora unamita, pues 7.92 metros es la mejor marca que ha registrado en su vida. Rocío no ocultó su emoción: "Estoy muy contenta; la verdad es que no me lo creo, nunca había dado esta marca. Cuando estaban los jueces en la medición y me dijeron la distancia, no les creí; me vieron dudosa y quisieron corroborarlo".

La presea de bronce en lanzamiento de jabalina la ganó la noche del lunes. La protesta interpuesta por la delegación puma contra de la silla facilitada a los atletas para realizar la prueba procedió, e hizo que Rocío Serrano se llevara el bronce con un total de 570 puntos.

"Es una medalla que me sabe a oro. Yo creí perdida la prueba porque no dimos la marca mínima, pero me sorprendió muchísimo cuando me dijeron que se había arreglado todo y que hasta alcanzaba medalla", dijo sonriente la lanzadora auriazul.

En cuanto a tenis de cancha, Omar Márquez fue eliminado en la primera ronda por su rival Joaquín Palma, del Estado de México, uno de los mejores sembrados del torneo, con parciales de 6-4 y 6-0.